Perdidos en un laberinto de referentes

Holaa!!

Lamento muchísimo mi larga ausencia en el blog...sufrí un proceso de ermitañamiento interior, me exilié durante una temporada a una cueva, y viví dentro de un barril, donde como supondréis no me llegaba internet. Pero todo eso es ahora cosa del pasado. Ya me he afeitado la barba y vuelvo a ser el civilizado buscador de referentes de antaño! (xD)

En mi retorcida búsqueda de la paz interior, me vino a la cabeza el recuerdo de un bonito referente que hacía tiempo quería comentar: los laberintos en las catedrales góticas.

Las catedrales góticas (estas taaan grandes, apuntadas y con vidrieras de colores) a menudo incluían, tanto trazados en la planta como a veces en alguna pared exterior, unos motivos alegóricos en forma de laberinto.

Muchas teorías hablan sobre estos símbolos. He leído que forman parte de la simbología cabalística, que se relacionan con la masonería, con la alquimia..de todo...pero la que más me gusta es la explicación clásica, claro! ^^

Según mi profesora de arte, son una alusión al de Dédalo, el famoso laberinto en el que fue encerrado el minotauro (me estoy dando cuenta de que soy un poco monotemático, no??) y que era un símbolo de la figura del arquitecto, que los maestros de obras medievales mandaban representar, generalmente a la entrada de la catedral.

Ya que hablamos del tema, cabe comentar el uso decorativo de los laberintos que se ha venido dando desde el Barroco, aquellos jardines monumentales rodeando grandes palacios, o esos que nos suenan del cine, en los que la corte se perdía a modo de juego durante el Romanticismo. Vaya, parece que (para variar) hemos encontrado otro invento de nuestros queridos griegos que ha dejado huella en la historia!

Un saludo desde Almassora! ^^

Arturo Soler, IES Vila Roja