"El de pies Ligeros" como lo llamaba Homero, se caracterizaba tanto por sus virtudes como por sus defectos. Éstas virtudes son que despreciaba los bienes materiales, era sincero, moderado, de espíritu guerrero y resinstente al dolor, a la vez que seguro, valiente, fuerte, persuasivo y dulce. Pero él también era humano, y tanía sus defectos como por ejemplo su orgullo, por el que se niega a luchar hasta que Patroclo muere en el campo de batalla, y su competitividad en el terreno profesional.
Creo que todas las personas tienen un Aquiles en su interior cuando digo que en el trabajo son competitivos, ya que aspiran a ser los mejores y a llegar a lo más alto. Aquí de lo que se trata no es de que los medios sean lícitos o no , sino de que se les reconozca socialmente.
4 comentarios:
Entonces ¿vale más una vida breve e intensa que una larga y tranquila?
Hay otras maneras de ver a los Aquiles de nuestros días, los que se empeñan en vivir intensamente, a costa de cualquiera. ¿Os suena?
Uno de los rasgos que has destacado de Aquiles es su dulzura, no se exactamente a qué te refieres ¿podrías explicarme algún pasaje donde se demuestre tal afirmación?
Saluditos
Depende de tu personalidad,tener una vida larga y tranquila está bien pero si no tuvieras obstáculos que superar sería sumamente aburrida.
Una vida larga y tranquila me parece bien siempre que tengas alguien con quien compartirla y sino, preferiría morir luchando.
La elección entre una vida corta pero inolvidable o una vida larga y tranquila la encontramos a lo largo de la historia en distintas ocasiones.
Van dos puntitos para esta reflexión.
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